domingo, 11 de noviembre de 2012

Lanús goleó a Tigre y esta expectante

Lanús consiguió su quinto triunfo consecutivo, quedó a tres puntos del líder Vélez y se calzó definitivamente el traje de candidato. Es que a pesar de que arrancó abajo por el golazo de Pérez García, el equipo de Guillermo Barros Schelotto lo dio vuelta gracias a un cabezazo de Pizarro y a la ayuda de Javier García, quien marcó un gol en contra cuando intentaba rechazar un centro de Regueiro. En la segunda mitad, Fritzler y Romero estiraron la diferencia.


Tigre, por su parte, aún no puede traducir en el Torneo Inicial su bien presente en la Copa Sudamericana: en el certamen local el conjunto de Victoria aún no ganó y está a tres puntos del fondo de la tabla.
Pérez García había definido con clase por arriba de Marchesín y le había dado al equipo de Victoria una rápida ventaja en un partido que arrancó abierto.
Porque Lanús, que está a seis de Vélez propone y lo tuvo a los 3 minutos con un cabezazo de Romero que García contuvo con seguridad. Y porque Tigre acelera cuando cruza tres cuartos de cancha y así inquieta el arco local.
Sin embargo, el empate llegó en una pelota parada. Pizarro se elevó tras un corner y metió un cabezazo impecable para igualar las cosas.
Y a los 38 de la primera mitad, Regueiro metió un centro muy fuerte tras un gran desborde desde la izquierda. Y Javier García, en un intento de rechazar la pelota, se hizo un gol increíble al empujarla dentro del arco con los puños.
No fue claro con la pelota, pero tampoco sufrió Lanús en el segundo tiempo. Pudo haber estado más tranquilo el conjunto del Sur si García no tapaba el potente disparo desde afuera de Regueiro en una contra.
Tigre no encontraba los caminos al arco de Marchesín y Lanús estaba bien parado atrás. No obstante, a los 32 pudo ser el empate del visitante. Cisterna entró al área tras una gran jugada colectiva y su remate cruzado fue apenas desviado por el arquero del equipo local.
Y tres minutos más tarde Lanús liquidó el encuentro. En una contra sin fisuras Romero quedó sólo frente a García y se la cedió a Fritzler, quine la empujó con el arco vacío.
A los 38, Romero puso cifras definitvas la encuentro. Recibió un centro por abajo de Regueiro y no tuvo más que poner el pie para vencer otra vez la resistencia del arquero de Tigre.
Y, si faltaba algo al conjunto de Victoria, Marchesín le atajó un penal a Botta, quien le pegó sin demasiada fuerza.

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