Llegó el Cebolla. Fueron habilitados los demás refuerzos y ya pudieron debutar con la camiseta roja. El equipo ganó los tres primeros partidos de la era Pellegrino. Todo parece ir acomodándose para Independiente a y las certezas fueron tapando a las incertidumbres. Pero hay un enigma que todavía no se descifró en Avellaneda. Es el enigma Mancuello.
En su cabeza ya estaba instalada la idea de decir adiós. El capitán, el goleador, el referente rojo, Federico Mancuello, consideraba que era el momento oportuno para partir del club que lo vio nacer como futbolista. A los 26 años, sentía que el receso invernal le iba a traer un nuevo destino para continuar con su carrera en el exterior. Sin embargo, pasó la pretemporada, comenzó el torneo y él sigue entrenándose con la pilcha del Diablo.