La separación llegó en medio de un escandaló, donde se habló de violencia doméstica de los dos lados, agresiones, insultos e infedilidades.
La picaseso, como la llamó el padre del jugador a Anderson durante la disputa del mundial de Sudafrica 2010, puso fin a la tumultuosa relación después de entererse que el Micha fue a una fiesta en Miami del brazo de una hermosa modelo de la que no se supo el nombre.
Esta fiesta fue organizada por el Chacho Coudet y el Burrito Ortega en Miami y concurrieron varios ex-River Plate para festejar el retorno a la Primera A del equipo de sus amores. La fiesta se extendió a un conocido boliche gay de la ciudad estadounidense.